Nuestro concepto pedagógico
En nuestro trabajo, damos especial importancia a los siguientes aspectos:
- mutuo respeto y aprecio
- empatía
- responsabilidad e independencia
- confianza
- reflexión
- condena de todo tipo de violencia
- concienciación de la propia situación
- concienciación y desarrollo de los propios recursos
- vida sin drogas
En los hogares de acogida, los jóvenes trabajan en conjunto con sus educadores estos temas. Durante excursiones y actividades grupales, también se abordan estos temas en conjunto.
Trabajamos
- orientados a la búsqueda de soluciones
- basándonos en la pedagogía del trauma
- adaptádonos a los jóvenes de manera individual
- con atención y apoyo flexible
- con ofertas terapéuticas y terapia integrada
- aplicando conceptos de la pedagogía experiencial y de aventura
- respetando la igualdad de género
apoyándonos en
- la atención médica y psiquiátrica
- atención psicológica
- informes regulares
- el plan de apoyo educativo individual de cada menor
- la disponibilidad permanente del equipo directivo pedagógico
- un equipo comprometido con pasión por el trabajo pedagógico
- sesiones regulares de supervisión externa
Debido a que todos los menores inicialmente son alojados individualmente y suelen vivir a cierta distancia entre ellos, es muy fácil organizar actividades y excursiones conjuntas solo cuando sea adecuado y enriquezca a los jóvenes.
Se fomenta que los menores en los hogares de acogida conozcan a jóvenes locales en un entorno normalizado, preferiblemente a través de la participación en actividades deportivas o culturales.
Los menores con síntomas de trauma y comportamiento hipersexualizado son alojados en lugares muy protegidos para poder abordar sus problemas.
La convivencia con animales domésticos y las experiencias en la naturaleza desempeñan un papel importante en nuestro proyecto. A menudo, el contacto con los animales ayuda a los jóvenes a acercarse a sus emociones y comprender mejor su situación y sus dificultades. Los animales no hablan, no guardan rencor, no se interesan por los puntos débiles o fuertes de las personas. Aceptan al menor tal como es. Para los adolescentes, este aprecio incondicional puede ser una experiencia muy positiva.
Dado que la trayectoria de muchos de los jóvenes que acogemos ha dificultado la comunicación, buscamos nuevos canales de comunicación para llegar a ellos nuevamente. En este sentido, cada menor cuenta con un/a educador/a personal que está disponible las 24 horas del día. La intervención educativa se adapta a las necesidades y requisitos de desarrollo de cada individuo. Nuestro personal es seleccionado según criterios estrictos y tiene acceso a formación interna y supervisión. Nuestra entidad cuenta con una amplia experiencia en el trabajo socioeducativo con menores.